domingo, 19 de febrero de 2017

RETRATAR LOS FETICHES MAS OSCUROS DE JAPON






Son Marido y mujer, BJ y Richeille, los Formento crean fotografías que rayan en lo fílmico y espectacular, al mismo tiempo que guardan un aire antropológico y casi documental. La pareja comenzó a colaborar en 2005, uniendo la experiencia de BJ en fotografía de moda y Street style con el constante y adiestrado trabajo de Richeille como directora de arte en Nueva York. Sus capturas abarcan diversos temas, ya sea la vida en general y desde una perspectiva occidental, o un vistazo a las viejas y perdidas costumbres del oriente. Implicaciones culturales y estéticas del planeta a través de escenarios ambientados y colores saturados son las constantes en una producción que conjuga dramatismo nocturno con desnudos híbridos del exceso y la delicada tradición.

“Queríamos capturar la peculiaridad, incluso la idiosincrasia, de la cultura japonesa antes de que ésta se diluya más allá del reconocimiento a través de la influencia de la modernidad”, dijo Richeille sobre su trabajo en Japón, dando muestra de que esas oscuridades retratadas con su lente no son otra cosa que el intento de guardar tenebrosos fetiches en sus identidades más castas y honestas, de mayor folclor.”



“The Japan Diaries”, como se titula esta colección de fotografías, es una suma de desvelos y sombras que no buscan ocultar absolutamente nada, sino revelar todo lo posible y acercarlo a más no poder. Japón es tan extraño y ajeno a la cultura occidental que a todos nos parece otro planeta; en términos de sexualidad, mucho más. Las sombras de dicha región, alumbradas por las luces neón y esa identidad afrodisíaca tan fervorosa que en el resto del mundo nos asombra, es consecuencia líquida tanto de las tradiciones que guardan como de su creciente cultura pop y los atentados de la globalización a su historia. Esa extrañeza animal y espiritual que es posible de admirar en el viejo arte japonés adquiere nuevas tonalidades en el trabajo de los Formento. La sensualidad de una ciudad tan cerca del mar y sus bestias, hace que la configuración de personajes y sentimientos en el aire se torne extravagante en cada retrato.






Si bien no son fetiches explícitos lo que se captura en las tomas de BJ y Richeille, son escenarios espectacularmente sugerentes que retratan al fetiche, a la noche dadora de verdades y encuentros con el placer, no de la forma que Occidente lo haría –o preferiría–, sino de la frágil manera en que es. Con la mirada anclada en Japón, como una actitud que pretende no dejar caer en el olvido una cultura específica de la voluptuosidad, la fotografía de este dúo expresa el romance, el encanto y los sentimientos de un lugar que deslumbra con sus tinieblas



“The Japan Diaries” es una producción cuasiescénica, pero al mismo tiempo visceral, desmedida, poco controlada e impresionista que nos hace viajar de lo inusual a lo narrativo. Para conocer otros retratos del verdadero fetiche y no la parafernalia hollywoodense que consumimos, consulta las Fotografías que reflejan la perversión diaria en una comunidad del fetiche y El fotógrafo que pagó por espiar a cientos de japoneses en la intimidad de los hoteles. También puedes visitar el sitio oficial de Formento & Formento para conocer la totalidad de su producción.






La oscuridad no oculta ni es su cometido principal la perturbación de la mirada. De hecho, a más sombras y mayor negrura en el horizonte, puede que lo imperceptible para los ojos se haga presente para el resto de los sentidos; quizá con el oscurecimiento de la realidad sea más fácil para el tacto o el oído encontrar sus verdaderas vocaciones en el mundo. Así también los misterios reales del acontecer.




La noche, natural o artificial, es el espacio en que los sueños alcanzan su punto más álgido, donde la lucidez se obtiene en el ocultamiento y las respuestas no dependen de un fulgor extenuante.
Muy al estilo de Lord Byron, el escape del sol y la disolución de los rayos en el espacio eterno, cuando la helada tierra oscila entre la ceguera y el universo sin luna, los hombres olvidan sus pasiones, aunque ello no signifique que omitan sus ideas del deseo. La lascivia perversa en los campos del anochecer se convierte entonces en un ejercicio de reconocimiento alrededor del erotismo verdadero y exento de maquillajes pornográficos o vacíos de sentido.




Aunque a primera vista el matrimonio Formento parezca inaugurar una producción fotográfica inspirada en la carnalidad pura, no es su principal cometido guiarnos por un sendero de exuberancia placentera sin ton ni son. Justamente en esa noche que se pretende diabólica, retorcida –porque claro, todo lo noctámbulo se entiende siniestro para las mentes planas–, es que el imaginario erótico de la pareja se torna distinto, exquisito y lleno de orientaciones bien planeadas.

Por Eduardo Limón enero 14, 2017

1 comentario:

  1. Los grandes desconocidos y los grandes maestros , su disciplina , trabajo,creación , superación, ...lo Japoneses artistas de la vida.

    ResponderEliminar